Día 218
Estoy harta de las minitas que se creen más que otras solo por que tienen un bolso de Louis Vuitton o Channel o usan sus zapatos de plataforma para aplastar a cualquiera que se les cruce en el camino. Estoy harta de las minitas que menosprecian a las que no son iguales que ellas, a las que no sean amigas de ellas o simplemente porque viven en otro lugar que no sea un barrio fino. Estoy harta de las minitas que se sienten orgullosas o re inteligentes porque se bajan una botella de vodka solas. Estoy harta de las minitas que miran de arriba-abajo la ropa de los demás como si fueran un jurado de algun text psicofísico. Estoy harta de las minitas que te hacen una sonrisita y cuándo no las estas mirando, te critican o simplemente se burlan. Estoy harta de las minitas que se pasean por la vida con sus Blackberry's o Iphone como si eso determinara que estas "in" o "out". Estoy harta de las minitas que piensan que se visten bien y en realidad no saben lo mal que combinan las cosas. Estoy harta de las minitas que sólo hablan de chicos, joda, ropa, joda, viajes, joda, chape, joda, previas, joda, joda, joda, joda, y ahí se les acaba el vocabulario, y peor aún, con ese tonito tan "sorry" (como si tuvieran la nariz tapada). Estoy harta de las minitas que pretenden que las respeten y en su guardarropas solamente tienen minifaldas. Estoy harta de las minitas que se creen nenas de papá, que esperan que les sirvan todo en bandeja de plata y que encima, pretenden que el resto del mundo gire a su alrededor. Por favor, mírense el ombligo a ver que tan limpio está y después me cuentan.