Día 211

Me quiere. No me quiere. Me quiere. No me quiere. Me quiere. No me quiere. Y esa es la cuestión. Por momentos, es el ser más especial que halla habitado en este mundo el único, el más encantador, todo un príncipe azul, y de repente, es lo más despreciable, desagradable, y deshonesto que halla conocido. Lo amo pero a la vez lo quiero matar, y no es un típico dilema que cualquier ser humano, y con sentimientos, tendría. Se que no lo hace apropósito, se que me quiere, me valora y me respeta, pero no se cuando lo hace de corazón y cuando por conveniencia. Y las noches se hacen eternas cuándo espero un te quiero de alguien como él, que no le importo demasiado, pero cuando me ama no hay otra cosa que decir. Me ama y ya y no me quedan dudas. Con mis errores y todo lo demás. Pero estar a su lado implica una lucha constante entre lo que es querer y lo que es odiar. Es amarlo a pesar de todo y sin embargo, es morir en el intento.

Entradas populares de este blog

Dia 408