Día 327
¿Qué harás cuándo te encuentres frente al espejo sola de una casa grande, vacía y silenciosa, dándote cuenta que una lágrima resbala por tu piel? ¿Quién será tu pañuelo si solamente los usabas? La familia es ante todo lo primero, lo último, y lo primero otra vez, aún cuándo los amores y hasta esos mejores amigos que considerabas de fierro. Es como una cadena de favores, ayudas a uno y tienes asegurado que la ayuda volverá a ti. Es un circuito de amor necesario que no se puede elegir. No se la juzga ni se pregunta porqué. No es obligación quererla pero si respetarla y honrarla hasta en la adversidad. ¿Cuándo te vas a dar cuenta de eso? ¿Cuándo ya ninguno llame para saber como estás o cuándo ya ni siquiera te quieran atender? Mi convicción es que en la vida todo vuelve, la tuya, valla uno a saber cuál es.
